Las Clínicas y sanatorios se encuentran en una encrucijada tremenda por varios motivos a considerar. Están en terapia intensiva como expresa el título, pero con un agravante. Le faltan médicos.
Las obras sociales pagan diferidas las prestaciones que se realizan, generando un desfasaje financiero tremendo, cuyo costo hace desaparecer la rentabilidad de los distintos actos médicos.
- Los médicos emigran a países con mejor oferta laboral sobre todo los de especialidades críticas como terapia intensiva, unidad coronaria, neonatología, pediatría, entre otras.
- El gobierno, con los diversos cepos, ha impuesto un régimen de importación que obstruye la provisión de insumos y elementos descartables esenciales, debiendo en consecuencia reprogramarse cirugías, lo que disminuye la facturación mensual acrecentado así mucho más la endeble situación económica financiera y en varios casos retarda la eficaz respuesta médica.
- No se permite incluso la importación de muchos repuestos para aparatología importada.
- Los proveedores que poseen insumos no los venden sino a precios muy superiores a los que corrigen los financiadores de salud, basados en los índices inflacionarios publicados por el Indec.
Las correcciones se aplican y se cobran con 30-60 y 90 días de demora por parte de muchos de los financiadores de salud anteriormente mencionados. El impacto inflacionario lo absorben sanatorios y clínicas. - El gobierno impone aumentos y bonos que resultan impagables para muchos prestadores de salud generando el quiebre de las economías de los prestadores.
- El gobierno provincial de Mendoza cobra el impuesto a los ingresos brutos más altos (en el área de salud) de la Argentina.
- El gobierno paga remuneración por guardia de médicos muy por encima de los valores que maneja la salud privada, compitiendo deslealmente con los prestadores del área mencionada, ya que esos montos salen de los impuestos de los que aportan trabajo en hospitales, clínicas y sanatorios privados.
Lo antes expuesto son algunos de los motivos que llevan a poner en peligro la salud privada.
Medidas urgentes para salvaguardar la prestación privada son imperiosamente necesarias. Resolución de todas las asociaciones médicas: atento a la situación descripta, las diferentes asociaciones que representan a los médicos y sus especialidades, han dispuesto a partir del 1 de setiembre lo siguiente: si los financiadores ( obras sociales) no abonan 6.000 pesos la consulta, todos los pacientes serán considerados particulares y deberán abonar ese monto mínimo.
Belén Sanchez