Es el deporte más popular a nivel mundial. Despierta emociones varias, pasiones sin control, adhesión a los colores incondicional, chanzas, chistes y cargadas, también amarguras y decepciones profundas hasta llegar al suicidio. Es motivo de acompañamiento al equipo de amores, trasladándose por miles de kilómetros, consumiendo tiempo y dinero escasos.
Lo importante e inevitable, para muchos, es alentar los colores, estar siempre, hacer el “aguante” por horas, días, bajo todo tipo de inclemencia climática y en las condiciones que amerita o se pueda.Padres con bebes presentes en horarios vespertinos o nocturnos.. Hay que llevar los trapos, cantar todo el tiempo y estar, siempre estar, siempre y como sea.. Es el motor y leí motiv de la vida para muchos.
También con situaciones asombrosas y de difícil explicación; Bangladesh, país asiático de 116 millones de habitantes, festeja los triunfos de Argentina como propios con millones de ciudadanos en las calles. Cuestión de resentimiento hacia la corona británica,sostienen algunos.
Es el fútbol, el más popular de los deportes.
En ese maremarum de incondicionalidad anida también lo peor: la marginalidad y la delincuencia de los “barras”. Delincuentes, organizados en bandas, dominantes de la tribuna popular y muchos apañados por dirigentes cómplices o timoratos, son dueños de los negocios indebidos paralelos, apretadores continuos y actores de violencia hasta la muerte.
También sirven de”mano de obra” para políticos inescrupulosos, que marcan el territorio a fuerza de pintadas, aprietes y violencia. Todo servicio.
Aparece también dominante la estructura dirigencial todo poderosa. FIFA, Conmebol, Concachamp y varias más,de las que dependen las entidades que rigen el fútbol en los países. Son los mandamás absolutos que reglan y dirigen el juego, sin prácticamente límites, algo difícil de dimensionar, comprender.e insólitamente aceptado y validado en el mundo. Veamos.
1) Los órganos que dirigen y administran el juego no tienen ningún límite: en efecto, su accionar está fuera de la Justicia de todo tipo y alcance.
Si cualquier institución futbolera o un grupo de jugadores e incluso alguno en forma individual, considerara que sus derechos fueran vulnerados o hubieran sufrido alguna incorrección o error evidente en su contra y decidieran recurrir a la justicia ordinaria en busca de reparación, la supra nacional FIFA, cualquier autoridad continental o las nacionales, pueden excluir de la competencia a jugadores o instituciones , por encima de la Justicia.
La dirigencia futbolera está por encima de la Justicia. Reglas propias incontrolables.
La única excepción la produjo el poderoso EEUU. Cuando FIFA con Blatter a la cabeza y con la presencia del expresidente Bill Clinton, desairó al país del Norte designando a Rusia y Qatar como sedes mundialistas a través de prácticas “non sanctas”, el escarmiento se hizo sentir.
Sin prisa, pero sin pausa, dirigentes del fútbol mundial fueron encausados, detenidos y apartados de sus cargos por haber cometido ilícitos recibiendo coimas para asignar las sedes mundialistas, los derechos de televisión y sponsoreo, en detrimento del país americano.
El “cachetazo yanqui” fue de tal magnitud que a posteriori el país fue sede de Copas América, del primer mundial de clubes y lo será del próximo mundial. En EEUU el fútbol no es el deporte prevalente. El rigor se hizo sentir y como.
2) La sanción a Independiente de Avellaneda: en esta instancia, el dislate se llevó a su máxima expresión e involucró no sólo a los dirigentes de fútbol, sino a fuerzas de seguridad, políticos e hinchas comunes arrastrados por la violencia inusitada y el descontrol. Serie completa de mala praxis, inacción, torpeza, demoras y barbarie.
Señalemos la sucesión de desaguisados.
a) Los hinchas de Universidad de Chile y sus barras bravas: Una cantidad de 3.500 aproximadamente, se hicieron presentes para alentar a la U. Entre ellos, se entremezclaron los barras, con antecedentes sobrados.
En las inmediaciones del estadio, desde temprano, cometieron tropelías de todo tipo los delincuentes. Inmunes y sin presencia policial preventiva o represiva..
En el estadio y desde temprano, los violentos se apropiaron de la tribuna , sus pasillos, los puestos de comida y bebida, los sanitarios y destrozaron todo, incluídas las cámaras de seguridad. A su antojo se proveyeron de elementos para la guerra contra la parcialidad roja. A su entera voluntad, los barras y no la mayoría de la hinchada, hicieron lo que premeditadamente habían planeado.
Arrojaron antes, durante e incluso durante la suspensión del encuentro todo tipo proyectiles contra los simpatizantes locales ubicados en la tribuna inferior y cuando estos se protegieron la emprendieron contra los asentados en la esquina próxima. Con un objetivo y propósito claro, avalado por la sanción del tribunal de disciplina de Conmebol. Hechemoslo a perder que puede existir la posibilidad de avanzar en la copa Sudamericana, sin triunfar en el campo de juego.
b) La policía de la provincia de Bs As: es una obviedad que la fuerza de seguridad sabía lo que podía suceder, pero brillaron insólitamente por su ausencia, antes y durante. Aparecieron recién emboscando, sin distinción, a los simpatizantes chilenos deteniendo a más de 100, una vez suspendido el match. Liberados con rapidez por la Justicia y con intervención hasta del presidente de Chile, el ministro del Interior y el embajador y todos sus funcionarios. Cuestión de Estado para Chile, con argumentación subjetiva porque obviaron la conducta de los antisociales connacionales.
Reiterada la conducta e impericia de la policía de la provincia. Basta ver como transcurren el día a día millones de bonaerenses, preferentemente en el Conurbano, para comprender lo sucedido. Fuerzas de seguridad que no aseguran. Dogma y extremismo ideológico. La fortuna, exclusivamente, evitó la presencia de la muerte.
c) Los dirigentes de la Conmebol y de Independiente de Avellaneda: parecieron novatos improvisados, inexpertos e incapaces. Por lo acontecido resultaron inútiles en extremo y sólo la buena fortuna los apartó de consecuencias irreparables.
Partido de jurisdicción de la Conmebol y responsabilidad organizativa del equipo local. Los dirigentes del Rojo, sin ningún tipo de previsión ni control ubicaron a la hinchada chilena en una bandeja superior, sin barrera de contención alguna. Improvisados e ingenuos. La parcialidad local que pobló la tribuna inferior a merced de los bárbaros inadaptados.
Conmebol, ausente con aviso, permitió el increíble desacierto. También demoró la suspensión, cancelación del partido, como lo definieron. La dirigencia roja impotente.No tanto como para en el día siguiente apersonarse en Asunción de Paraguay, para hacer lo y tempranero.
Igualmente, no tuvieron previsíón manteniendo custodia suficiente y el portón cerrado, que permitía el ingreso a la tribuna visitante, cuando la violencia había llegado a un extremo importante y la venganza de la barra brava roja era inminente. Vía libre.
Impericia y desidia dirigencial, factores importantes.
d)Parte importante de la hinchada del diablo rojo y la barra brava: embebidos de ira y frustración numerosos plateístas y parte de la popular alentaron y demandaron venganza.Incitaron a más violencia, incluso coreando “La barra tiene miedo” como motivador a la barbarie propia.
Hacía allá partieron los “bárbaros” dispuestos a matar si era necesario. Sólo la Providencia, si existe o la suerte evitaron la muerte. Fue el punto final de un espectáculo dantesco, que puso en escena lo peor del ser humano.
e) Sanción de la Conmebol: para estar a tono con el desastre vivido, el tribunal de disciplina emitió sentencia, dando por perdido el partido a Independiente, por ser el responsable de la organización y penando a ambos equipos con sanciones pecuniarias elevadas y disponiendo ausencia de público propio para varios partidos próximos.
La sentencia debía ser similar para ambas instituciones; apartarlas de la continuidad del torneo.
No hubo en la lamentable jornada vivida, menos culpables. Todo fue un desquicio, donde el mismo órgano sancionador tuvo su cuota de responsabilidad. La sentencia debió ser ejemplificadora, reparatoria mirando al futuro y con la suficiente prudencia para que quien agrede inicial y premeditadamente, recibe una pena menor. Dislate.
El fútbol viene transitando caminos oscuros hace tiempo. Lo sucedido en el partido entre la U e Independiente, más la resolución de Conmebol, es un eslabón más que degrada y profundiza la crisis y la desconfianza, en el juego que involucra a millones de fanáticos en America del Sur.
La pasión sana no merece tanto destrato, incapacidad, irresponsabilidad e incongruencia.