Con palabras de” barrio”, de reunión de habladores en ronda de amigos, el ministro/candidato se trató de desligar del tema deuda con el FMI y correrse de su responsabilidad en la crisis económica.
Apelando al Var:
Massa, recurriendo a su conocida versión “ camaleón ventajita”, puso foco en la herencia recibida, sin mencionar a los 3 años y 9 meses de gobierno kirchnerista y el año de su propia gestión.
Respuesta argenta típica: la culpa es de otro u otros y mi tarea finaliza encontrando la excusa. Desde ese lugar ficticio practicado con asiduidad y durante tantos años, los argentinos nos hemos desligado de nuestra responsabilidad. Tarea fácil y descomprometida. Así nos va.
Más grave es cuando la utilizan quienes están a cargo de los asuntos públicos. En esta ocasión Sergio Massa tiene la responsabilidad máxima y cuasi en exclusividad. Por decisión propia y buscada, aún así, trató de correrse y evadirla. Es como querer hacerse el distraído con la inflación que duplicó o con la derrota de Malena en Tigre. Toda obra propia.
Quien sino él llevó la máxima negociación con el FMI. Son numerosas las” fotos sonrientes de ocasión” con Kristalina Georgieva y las varias con los máximos funcionarios del Fondo e incluso con similares del gobierno de E.E.U.U. De todo tipo y circunstancia, en ocasión de los varios viajes para tratar el tema deuda. Muchas en el rol de mago e ilusionista. Y otras en la del típico” vivo argento”. Todo lo podemos. Pero queda registrado.
Massa acordó la devaluación post Paso, entre otras varias medidas negociadas con anterioridad, por la que el daño causado, fue mucho mayor al esperado. Y en el medio del desastre quiso implantar firmeza negociadora patriótica:”Querían el 100%, le concedimos el 22%”. Ganador. Dudoso, no comprobado.
Sergio Tomás Massa, ”el tomuer esta calentito y vos sos el médico forense a cargo”. No te podés hacer el “dobolu”. Sorry.