El marco es la Argentina de los últimos 80 años. País destrozado, lleno de “curros”, prebendas, pobreza, indigencia, ignorancia, violencia, conductas miserables sociales e individuales. Todo en el mismo barro.
En ese escenario irrumpió Javier Milei, con sólo dos años de actuación en la vida política. Con ideas claramente expresadas,sin tapujos ni anestesia, pero sin plan de gobierno, equipos, con escasa representación parlamentaria y con muchos actores sin experiencia previa.
Al rescate de las carencias, los primeros en aparecer fueron Mauricio Macri y Patricia Bullrich. Gran parte del Pro con Mauricio y comprometida en la gestión Patricia. Acompañamiento mayoritario, sin el “averiado”Horacio Rodriguez Larreta.
El resto de los partidos, coaliciones de ocasión y políticos considerados “amigables” oscilan entre apoyo condicionado, dudas, interrogantes e incluso rechazos varios y también enojos.
El kirchnerismo, la izquierda y los movimientos sociales en pie de guerra. Algunos con actitud golpista desde el primer día. Sin resuello ni espera. La Justicia militante está haciendo su trabajo. No es toda; pero gran parte fue colonizada por el populismo y a su servicio.
El ruido político, algunas palabras y actitudes del presidente, el DNU y la Ley de Bases y Puntos de partida para la Libertad de los argentinos, más las terribles desventuras económicas, tienen en temblor constante la realidad nacional. Es clave para el bien común y para el mismo gobierno la lucha contra la inflación, que de no ser fructífera, transformará los temblores en terremoto y de alta intensidad.
Palabras autorizadas del oficialismo,en off, señalan que el DNU Y la ley ómnibus en tratamiento son sólo la primera parte de tres o cuatro grandes proyectos más que van a ponerse en discusión. Interesante.
En medio del tembladeral surgen declaraciones, decisiones, nombramientos e incluso falta de ellos, que agregan más movimientos a las constantes oscilaciones de la realidad diaria. Resulta sorprendente que sigan en sus cargos camporistas y massistas y que incluso algunos lugares continúen sin nombramiento de funcionarios.
Demasiado massismo en funciones genera y alimenta suspicacias, al igual que las primeras declaraciones del ministro de Justicia, Cúneo Libarona, laxas en voluntad de investigar la corrupción del último gobierno. Contrario a la voluntad de una importante porción de la sociedad argentina. Pretendido paliar con el anuncio de la creación de una Fiscalía especial para ocuparse de la corrupción de funcionarios y legisladores. Ya existen fiscales, que muchos no investigan y todo termina en jueces de Comodoro Py como Martinez de Giorgi, Lijo, Rodriguez, Servini, Casanello y algunos más. Pronóstico reservado.
Scioli es la frutilla del postre. Si se debiera señalar un ícono de la casta, Daniel es la figura perfecta.
Menemista, duhaldista, kirchnerista castigado, sciolista, albertista y ahora libertario. Cartón lleno. Sin ideología ni un mínimo de dignidad. Maltratado por los Kirchner y hasta traicionado por su amigo Alberto, cuando anunció su precandidatura a presidente acompañado por la todo terrreno Victoria Tolosa Paz.
Un puching ball que recibe todo tipo de golpes en pos de estar. Sin ningún prurito ni límites.Grave su nombramiento como Secretario, impulsado por el ministro peronista amigo Guillermo Francos. Si esa no es la casta , la casta donde está. Las redes sociales demostraron mayoritariamente su disconformidad. Los desconciertos, que no son pocos, del presidente.
Importante para tener en cuenta: por encima de la constitucionalidad del DNU y la ley ómnibus, su tamaño inmenso, sus presuntos errores y desprolijidades, surge un dato o hecho relevante a tener presente y muy en cuenta.
Es la primera vez en los últimos 80 años que se propone una serie de medidas para destrabar la inmensa cantidad de regulaciones, trabas, privilegios, ventajas, exageraciones reglamentarias, impositivas, laborales y de variados tipos, que han crecido y proliferado absurdamente en la realidad nacional. Todo este despropósito nos ha depositado en el lugar actual. Trágico y sin exagerar, catastrófico.
Es la primera pulseada contra el régimen de atraso y dolor mayoritario establecido durante años.
AHÍ ESTÁN LOS REPRESENTANTES DEL PUEBLO DEBATIENDO LA INMENSIDAD DE LO PROPUESTO POR EL PRESIDENTE. Trabajando en época no habitual y debiendo estudiar y comprender inmumerables propuestas y muchas de cambio total y de importancia. No muy acostumbrados.
Sacando los representantes extremos habituales, el resto debe trabajar con responsabilidad, inteligencia y equilibrio y teniendo en consideración que representan la voluntad popular delegada y sin despreciar que el 56% de los mandantes optaron por el cambio de lo establecido. No son pocos.