Desde joven Rito Irañeta adoptó una vida con variadas facetas, muchas de ellas disímiles.. Su partida trágica, junto a su compañera Andrea de toda la vida,cuando en Zapallar(Chile) festejaban sus 50 años de casados con algunos de sus numerosos hijos, en manos de un ebrio irresponsable y fatal, impactó tristemente en el grupo de gente cercana, en los que lo habían conocido y en el mundo del rugby.
Al dolor se suma el fallecimiento de Maite, la vivaz, inquieta y siempre predispuesta Maite, la hermana cercana. Tristeza aumentada.
1) El deportista: Rito Luis, como lo llamaban sus amigos del rugby acentuando sus dos nombres, fue un jugador destacado desde sus inicios. Grande, muy grande físicamente, manejaba su humanidad con destreza, inteligencia y habilidad de uno de menores proporciones físicas.
Respetuoso de las reglas y con conducta intachable y juego prevalente, fue capitán de la primera división del Mendoza Rugby Club desde muy joven. Ejerció la capitanía con equilibrio y liderazgo natural, mientras crecía como jugador. Su siguiente paso fue el seleccionado de Cuyo( Mendoza en realidad) donde se desempeñó largo tiempo.
La frutilla del postre: por sus habilidades y adaptabilidad, el “maestro” Carlos Villegas, a la sazón entrenador de los Pumas, lo citó a integrar el seleccionado nacional. Máximo honor y orgullo para todo rugbier. Ocupó por su versatilidad un puesto diferente al suyo. De segunda línea habitual a pilar izquierdo. Sufría por su altura , pero pudo adaptarse. Paso exitoso por el rugby de principio a fin.
Anécdota risueña: de gira por las Islas Británicas con su Mendoza Rugby, apenas pisado Londres, adquirió una boina escocesa, que lucía con orgullo y placer, permanentemente. Subidos al magnífico subte londinense, con un grupo de jugadores, entre los que me encontraba, en una parada se introdujo un grupo numeroso de pasajeros. En un santiamén su apreciada boina escocesa desapareció.:
Advertido por sus compañeros porque no se había percatado, desolado expresó:”Que tienen contra nosotros los escoceses, amigos londinenses”, ante las risotadas del grupo. En un santiamén boina desaparecida y no reemplazada. Era única.
2) El funcionario público: arribado a la gobernación José Octavio Bordón, le encomendó una tarea relevante y compleja. Asumió la presidencia del Banco de Previsión Social, entidad financiera pública provincial. Tiempos tumultuosos de la economía nacional que tuvo que atravesar. Nunca había participado de la actividad política. Experiencia distinta.
3) El comerciante de artículos para el hogar: su padre y su tío habían instalado un negocio de electrodomésticos, Irañeta Hogar. Por circunstancias de la vida, joven junto a su primo Robertito, se hicieron cargo del negocio familiar. Lo llevaron adelante largo tiempo hasta que las grandes cadenas impusieron su tamaño. El negocio fue reconocido durante su existencia.
El mundo de los seguros lo atrapó a continuación.
4) Hombre de fe: Rito y Andrea eran fervientes católicos, como toda su familia, que devino numerosa. Integró el Opus Dei mendocino haciéndolo con convicción y sin fanatismo. Hombre y familia de misa habitual, gran parte de su vida giró en torno a la Iglesia y su amor y creencia en el Señor.
La partida de Rito Luis pegó fuerte entre los que lo queríamos y apreciabamos y también conmocionó a parte de la sociedad mendocina. Lo mismo con el deceso de Andrea y Maite.
Quedan presente el gran padre de familia, el esposo amante, el luchador en el ámbito comercial y el gran capitán rugbier. Te vamos a extrañar amigo, pero dejaste entre tus compañeros jugadores que condujiste tu sello de conductor de valía. Nos encontraremos.
Orlando R Terranova