Es un clásico del periodismo, pero en esta oportunidad, Belén, Joaquín y Fernando trataran de dar una vuelta de tuerca a la habitualidad de las crónicas evaluadoras sobre triunfadores y derrotados.
Ganadores totales:
1) Alfredo Cornejo: pese al mal humor con el que transitó toda la campaña y la importante cantidad de votos menos que obtuvo en relación a elecciones anteriores, Alfredo Cornejo construyó un triunfo importante. Y consiguió un honor único en los 40 años de gobiernos democráticos; los mendocinos lo ungieron como único gobernador reelecto. No lo habían logrado con anterioridad Pilo Bordón y Roberto Iglesias.
Incluso el porcentaje de votos al que arribó fue mayor al pronosticado. El casi 40% logrado, aunque con mucha ausencia de ciudadanos para ejercer el voto, legitima su vuelta al sillón de San Martín.
Lo espera una tarea ardua por el Estado económico social de la provincia y por su propia impronta y la de su legado durante el gobierno de Suarez; una institucionalidad débil y una presunta presencia férrea y hasta abusiva de los órganos de control y de una Justicia puesta en el tapete de las dudas. Debe restaurar un republicanismo democrático debilitado.
2) Francisco Lo Presti: en tierra de Daniel Orozco, intendente de Las Heras y candidato a vice gobernador de la Unión Mendocina, Lo Presti venció al supuesto caballo del comisario, el delfín de Orozco. Triunfo claro en territorio plagado de hostilidades extremas y agravios inconducentes. La victoria se agranda porque en la categoría de gobernador y vice triunfó la dupla De Marchi/Orozco.
3) Mario Vadillo: pese al flojo desempeño en las Paso, en la instancia definitiva, con ahinco y una estrategia confrontativa y de tono elevado, consiguió un número elevado de adherentes. Seis(6%) por ciento más de votos obtuvo en relación a lo logrado en las Paso. Cifra significativa de aumento. A su vez relegó al kirchnerismo al cuarto lugar en departamentos importantes como Ciudad, Godoy Cruz y Guaymallén. Sumó legisladores y concejales. Mucho voto de Milei y también de Petri lo acompañaron.
Su estilo de campaña se asemejó al de Javier Milei. Agresivo contra Cornejo y De Marchi, asimilándolos como lo mismo y asociándolos a la vieja política y la corrupción. Postura jugada, sumada al ataque a la minería y la defensa del agua. Terminó distanciado de Marcelo Romano, su compañero cercano. Dogmático en extremo, tiende a aislarse.
4) Ricardo Mansur: apartado hace tiempo del radicalismo su partido de siempre, fundó Sembrar y enfrentó con dureza a la gestión radical y a Cambia Mendoza. Al final del conteo, por menos de 200 votos de diferencia fue el candidato mas votado para la intendencia de Rivadavia. Hay alrededor de 1.000 votos impugnados. Se verá que depara la Junta Electoral. Por lo pronto y hasta ahora consiguió una victoria épica
5) Celso Jaque: el hombre se fue de la gobernación cabizbajo y mal valorado por los mendocinos. El kirchnerismo lo arropó, nombrándolo diplomático político como embajador en Ecuador y posteriormente director de la empresa más grande del país,YPF y con honorarios millonarios. Buena recompensa.
Pero el terruño tira. Volvió con todo y será nuevamente intendente de la postergada Malargue. Tarea ardua, pero revancha reconfortante.
6) Ulpiano Suarez y Mario Abed: con distinta importancia por las ciudades de las que se trata, ambos lograron los triunfos de mayor valor como intendentes. El alto porcentaje de adhesión obtenido en la Ciudad y Junín los legitima ampliamente. La ciudad Capital vuelve a confirmar 40 años de dominio radical y siempre con adhesión masiva.
Ulpiano se confirma como adversario interno de Petri para la postulación a gobernador en la próxima parada electoral. Tadeo García Salazar, otro aspirante, probablemente se proyecte desde algún lugar en la gestión del Poder Ejecutivo. Anhelos futuros.
7) Esteban Allasino: con el sorpresivo alejamiento de Sebastián Bragagnolo de la política(criticado fuertemente en voz baja al interior de la Unión Mendocina), Allasino se puso al hombro la candidatura y consiguió un triunfo relevante. Ganador pleno, dejó muy atrás a la apuesta radical fuerte de Natalio Mema.
Ganadores parciales:
1) Omar De Marchi: su mayor logro fue en menos de 6 meses haber conformado una nueva fuerza política, agrupando sectores variados y hasta contradictorios y haber conseguido el segundo lugar con importante adhesión de votos e interesante cantidad de legisladores. Control republicano será tarea esencial. Complejo se visualiza el futuro en cuanto a consolidación de lo agrupado. No aparece sencillo.
2) Diego Costarelli y Marcos Calvente: en Godoy Cruz y Guaymallén revalidaron el predominio radical, aunque con menor porcentaje de votos de lo habitual. Extraño en Godoy Cruz y esperable en Guaymallén por el estilo” patrón de estancia” de Marcelino Iglesias y la mala y sospechada gestión en autorización y control de obras privadas. Quizás influyó la frustrada decision en torno a la reina vendimial departamental, abortada por la Suprema Corte.
3) Los legisladores entrantes de las distintas agrupaciones de la Unión Mendocina: sin la cobertura de la creación de Omar De Marchi hubiera sido muy difícil, sino imposible, que accedieran a una banca legislativa. Resta ver su actitud posterior y si permanecen unidos en el partido que los agrupó.
4) Gabriel Pradines: con el 25% de votos hizo una elección valorable el joven candidato del Pro en Guaymallén. Esfuerzo personal inmenso, caminó el departamento lugar por lugar y consiguió un apoyo interesante. Puerta al futuro, se verá si se abre.
5) Rodolfo Suarez: sin participar directamente en la elección, por el triunfo de Alfredo Cornejo lo reemplazará en el Senado Nacional. Premio quizás excesivo a una gestión pobre como gobernador. No disfrutó el cargo máximo de la provincia, tampoco enfrentó las adversidades iniciales con la firmeza y el temple necesario, se frustró su apuesta a Portezuelo del Viento y dejó dudas en cuanto a la transparencia en la adjudicación de obras públicas, en la creación de numerosas sociedades anónimas estatales y en lo referente a la gestión en materia de seguridad. Afortunado.
Perdedores:
1) EL Peronismo, el kirchnerismo, La Cámpora, Parisi, Ilardo, Anabel: como lo quieran llamar, individualmente o en conjunto, todos enviaron al tradicional justicialismo al subsuelo electoral. Menos del 15% de votos certificaron la peor derrota histórica peronista. Muy cerca de ellos se ubicó el Partido Verde e incluso los superó en departamentos importantes.
El control férreo de La Cámpora de la mano de Anabel, más la inacción y hasta el “temor” de los dirigentes peronistas clásicos, llevaron a este desastre. Ayudó la conformación de una fórmula 100% kirchnerista con el aditamento de un converso como candidato a gobernador y un ultra y fanático camporista a la vice gobernación. No es amigable Mendoza para el kirchnerismo camporista.
Ardua tarea reconstructiva aguarda.
2) los hermanos Félix y los intendentes peronistas de ciudades importantes: floja fue la elección en San Rafael y Maipú. Recluídos en el Sur parece ser el destino de los hermanos Félix y complejo el futuro del “dubitativo” Matías Stevanato.
3) Daniel Orozco: frustrada la vice gobernación, jugada difícil, la derrota de su candidato en Las Heras le proyecta un futuro político personal incierto. Lo único seguro es la vuelta a la medicina. Paso limitado por la actividad pública y futuro oscuro.
4) Participación ciudadana: el bajo número de concurrentes al sufragio le asestó un golpe duro a la democracia representativa. Preocupante y triste. Privaron el enojo, la desesperanza, la apatía, la falta de confianza en los políticos. Resentido en gravedad el poder ciudadano, resignando la posibilidad de delegar el poder popular. Tarea indispensable y prioritaria recuperar la credibilidad del poder delegado. Democracia debilitada.
5) Campaña llena de agravios, operaciones, fake news y falsedades: inhabitual en Mendoza y muy inconveniente. No vamos a abundar en detalles, pero fueron muy desagradables e innecesarias las descalificaciones extremas que se propinaron a través del basurero de las redes sociales Cambia Mendoza y la Unión Mendocina. Reprochables y no se deben repetir.
Finalizó otra instancia electoral en un duro momento nacional que condiciona y limita. Luego de un gobierno opaco de Rodolfo Suarez, el privilegiado y honrado gobernador reelecto debe insuflar y dotar a Mendoza de épica y proyectos y gestión clara en pos de salir del estancamiento en que se encuentra.
El pueblo debe estar atento, demandante y participativo, no ausente o distante.