Un deseo colectivo mayoritario subyacente varios años atrás y una situación presente crítica y en aumento, conformaban el escenario previo a las elecciones generales de este año.
Deseo colectivo mayoritario sumando las diversas fuerzas de distintas ideologías con una idea común: finalizar con el dominio casi excluyente del populismo en los últimos 20 años.
Presente crítico y en aumento sostenido de carencias alarmantes y de dificultades varias. Veamos la última estadística de pobreza del tercer trimestre de 2023 difundido por el Observatorio Social de la UCA
44,7% de pobreza que rozaría el 50% sin planes sociales. Seis de cada 10 menores de 17 años viven en la pobreza. Alberto en su despedida insólita se permite dudar de esta catástrofe.
Debemos agregar otro dato lascerante difundido hoy y rechazado con habitualidad por el populismo saliente por provenir ésta investigación del imperio, las pruebas Pisa, impulsadas por la OCDE y evaluación realizada luego de la pandemia. Se evaluaron 12.000 estudiantes secundarios de 15 años y de 457 establecimientos educativos públicos y privados de todo el país.
Datos hirientes: siete de cada diez estudiantes no logran el nivel mínimo de desempeño en matemática. En lectura y ciencia , 5 de cada 10 alumnos son los que no alcanzaron los niveles básicos. ¿Ignorantes los preferimos? Pareciera.
En este marco colectivo irrumpe explosivamente y en forma sorpresiva el outsider Javier Milei.
Eliminar la casta política, aplicar la motosierra a gran parte de las instituciones estatales paralizantes y el grito estentóreo y reivindicativo de “Viva la libertad carajo”, sintetizaron consignas e ideas que comenzaron a crecer con velocidad inusitada en el espacio y la discusión pública. No lo vieron venir.
Treinta por ciento de adhesión en la primera vuelta y un impactante 55,65% de apoyo en el ballotage lo auparon a la presidencia. Deseo colectivo mayoritario concretado en un marco general decadente agravado.
Se van, se van. ¿Se van?
Tantos años de ejercicio de poder populista y autoritario dejan su huella y su presencia expresa y también subyacente. Veamos.
1) Copamiento y colonización del Estado: durante todo el tiempo de ejercicio del poder populista prevaleció la colocación en el empleo estatal de militantes fanáticos por encima de ciudadanos con cualidades para desempeñar esas funciones. Lo han acelerado en los últimos días; aluvión de designaciones. Irresponsabilidad supina.
Ya se vivió durante el gobierno de Mauricio Macri. Bloquean y ponen el máximo esfuerzo para obturar toda posibilidad de cambio. Colocados para impedir.
2) CGT silente cuatro años y presente activa a partir del 11 de diciembre próximo.
Ya avisaron y no anduvieron con chiquitas. De vocero Pablo Moyano y en el acto realizado en un salón de la CGT de asunción de nuevas autoridades de UTEP, vinculada a Juan Grabois. Presentes también Hector Daer y Hugo Yasky, el Chino Navarro, Emilio Pérsico, el Cuervo Larroque, Kelly Olmos y Walter Correa, ambos ministros de trabajo, nacional y bonaerense. Todos buenos muchachos.
”Vamos a ser los primeros en salir a las calles”. Avisan primero para no ser calificados de traidores. No importa que durante cuatro años traicionaron a los trabajadores que dicen representar. No se tiene en cuenta. Priman los intereses de los compañeros en el poder por encima del interés colectivo del país. Y los propios, obviamente.
3) Los gerentes de la pobreza: se pasaron años en los dos lados del mostrador. No se pueden permitir estar en el destierro ahora. Todos los compañeros beneficiarios de millones de los diferentes planes de asistencia social a las calles. Ahí estará aguardando Patricia Bullrich. PRONÓSTICO RESERVADO.
4) Fanáticos ultra K, piqueteros de izquierda, el Polo Obrero, orcos y los ultra, lanzadores de toneladas de piedra: Listos y dispuestos. Ya avisaron y va a ser a tiempo completo. Es una anomalía no permitida no estar en el poder. Es sólo para ellos, exclusividad para populistas nac and pop, al servicio de la causa nacional y por supuesto de la propia. VA A SER COMPLICADO.
5) Medios, periodistas, actores, jueces militantes, progresía que atrasa, educadores adoctrinadores, empresarios amigos y prebendarios y demás integrantes varios del populismo nacional: suman muchas voces y acciones continuas desvalorizando toda acción, idea o posibilidad de aquellos” usurpadores del poder” que osan cambiar. Todos los que no pertenecen al colectivo K son traidores al pueblo. 24 horas funcionando a pleno.
El campo del país ha quedado devastado y “ los muchachos” lo están minando completamente. La Argentina vive un desastre y lo que parecía una utopía, Argenzuela, se vive y percibe en muchos indicadores de la realidad diaria. Hambre, pobreza, indigencia, falta de productividad, inseguridad, ignorancia, clientelismo, adoctrinamiento, etc. Parada final: Venezuela. En tránsito apresurado y no es exageración.
Todavía Milei no arranca y está en plena marcha el plan destituyente.
Argentinos democráticos, sostenedores de la República deben estar prestos y atentos a defender la institucionalidad., Presentes con firmeza y convicción, sin violencia, pero sin abdicar de su convicción republicana. En paz, pero sin ser corderos. No permitido el helicóptero, las toneladas de piedras al Congreso, los Baradel adoctrinadores de chicos y jóvenes, los Beliboni agresivos, los dueños del poder a la fuerza.
Trabajando y esforzados en recuperar la patria, sin violencia, pero firmes en sostener la institucionalidad. Para que no queden dudas que se fueron por la voluntad mayoritaria del pueblo.
Que debe ser respetada. Es soberana.